La presentación se realizó en el Aula Magna de la UAG.
Por Alfredo Arnold/
Con gran éxito se llevó a cabo la presentación del espectáculo West Side Story (“Amor sin Barreras”) por parte del Departamento de Arte y Cultura de la Universidad Autónoma de Guadalajara (UAG).
El famoso musical de Leonard Bernstein llevado a la pantalla a principios de los años sesenta, fue puesto en escena mediante un ensamble de la Orquesta de Cámara, el Coro, el Grupo de Teatro y el Grupo de Baile de la UAG. Los más de setenta participantes, apoyados por el equipo técnico de iluminación, vestuario y sonido, produjeron una obra que cautivó a los cientos de espectadores que llenaron el Aula Magna.
“Amor sin Barreras” cuenta la historia de dos pandillas rivales, en un barrio marginal de Nueva York en los años 50. Un muchacho y una muchacha pertenecientes a grupos antagónicos se enamoran en circunstancias no propicias y se produce un desenlace trágico al estilo de Romeo y Julieta de Shakespeare. Tanto el musical de Brodway como la película ganadora de diez Óscar y tres Globos de Oro son considerados como obras maestras del espectáculo contemporáneo.
La puesta en escena por parte del Departamento de Arte y Cultura de la UAG requirió de un arduo trabajo colegiado entre la Orquesta de Cámara y el Coro que dirige el maestro Gamaliel Cano; el Grupo de Teatro a cargo del licenciado Jesús Esquivel Soto, y los Cuerpos de Baile que encabezan las maestras Magdalena Maldonado y Brenda Jiménez. El resultado fue una puesta en escena dinámica, emocionante, divertida y acompañada por la maravillosa música de la obra original.
El espectáculo dura una hora y media y consta de un solo acto dividido en 18 cuadros. Los principales protagonistas y cantantes solistas son Betto Morales González, que hace el papel de Tony, y Sarah Alcalá Luna, quien protagoniza a María.
El programa musical incluye 15 piezas, comenzando con la Obertura y enseguida vienen canciones muy conocidas como María, América, Tonight y I feel pretty, para cerrar con el Finale Somewhere.
El ensamble entre la coreografía teatral y la música fue muy bien logrado y así lo captó el público que ovacionó fuertemente a los artistas al término de las tres funciones presentadas.
